Toyo Kogyo nació en 1920 y se dedicaba, fundamentalmente, al negocio del corcho. Poco a poco fue diversificando su producción y fabrico, primero motocicletas y, más tarde, pequeños triciclos para el transporte urbano de mercancías.
En 1934, Jyujiro Matsuda, uno de los accionistas de la empresa, se propuso fabricar automóviles, para lo cual fundo la marca que lleva casi su nombre (tsu, en japonés, tiene un sonido casi idéntico a nuestra Z). Pese a que se realizaron algunos prototipos, la inminencia de la guerra mundial acabo frustrando el proyecto y Mazda no reapareció hasta 1960, año en que lanzo el pequeño automóvil con carrocería cupe y motor de motocicleta de 360 cc.
Este pequeño tracción trasera de dos plazas y cabrio de cuatro velocidades fue el punto de partida para la creación de una verdadera gama de modelos que permitió a la firma fabricar su unidad un millón apenas tres años después del inicio de la producción.
Como el resto de las marcas japonesas, Mazda inicio su expansión a finales de los años sesenta. Con los modelos Carol y Familia plenamente consolidados en el mercado doméstico, la firma empezó a exportar en 1967 las primeras unidades a Europa, y tres años después a Estados Unidos.
Se trato siempre de automóviles de diseño sencillo, robustos y de fácil mantenimiento, cuyo principal interés era un precio de ventas muy contenido, que favoreció su éxito, en especial en mercados sin industria propia, como los del norte de Europa. Paralelamente, Mazda decidió apostar por una técnica que en Europa solo había desarrollado NSU. Se trataba de motor rotativo inventado por el ingeniero Félix Wankel. Mazda lanzo el modelo R-100 en 1967, al que siguieron toda una seria de automóviles como la familia Cosmo o los deportivos RX, del que el RX-7, de 1983, fue el mas conocido fuera de Japón.
En 1980, Mazda se paso a la tracción delantera con el 323, un modelo gracias al cual llego a un primer acuerdo con Ford para fabricarlo de forma conjunta en Australia donde Ford carecía de modelos pequeños. En lo sucesivo, los lazos con el gigante estadounidense no dejaron de estrecharse, y así Mazda se integro progresivamente en la estrategia de la multinacional del óvalo con la realización de modelos gemelos, como la familia 121/Fiesta y Tribute/Escape.
En los últimos años, Mazda se ha caracterizado por apelar a sofisticadas soluciones tecnológicas. Además de seguir recurriendo al motor Wankel (un biplaza con un motor de este tipo gano las 24 Horas de Le Mans en 1991), la firma apostó en su momento por las tecnologías de cuatro ruedas motrices y directrices, así como los motores de ciclo Miller.
Mazda es una de las empresas lideres en desarrollo de prototipos movidos por energías alternativas, particularmente por hidrógeno, además en los 90 se integrado como miembro del Grupo Premier, junto a otras marcas. Ahora Mazda se ha desprendido, en gran parte de Ford, quedando casi como un marca independiente de vuelta.
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Originally posted 2011-12-11 18:33:08.