PRIMERA PARTE
Su diseño era muy parecido al de todos los Corvette. Pero el ZR-1 se distinguía del resto por su espectacular motor V8 diseñado por Lotus, todo de aluminio C2090-559 y que, con 375 CV de potencia, le permitía superar los 270 km/h de velocidad máxima.
Desde su primera versión, en 1953, cuando era símbolo de status para la gente de clase alta, el Corvette se distinguió como el más innovador de los automóviles americanos. Por ejemplo, mientras muchos sedanes americanos utilizaban frenos traseros de tambor, el Corvette tenía frenos de discos en las cuatro ruedas y suspensión independiente desde mediados de los 60s. C2090-610
Sin embargo, algunos detractores decían que el Corvette era demasiado grande y pesado, y que su calidad y diseño dejaban mucho que desear. Si se trata de rendimiento, es verdad que hasta que introdujeron la versión ZR-1, con motor Lotus, el modelo había perdido parte de su imagen arrasadora de los 60.
A General Motors la culparon de muchas cosas durante la década del 80: estilo poco imaginativo, ingeniería anticuada, resistencia a las innovaciones e importantes bajas de control de calidad. Pese a los ataques, seguía siendo considerada una marca líder en el mercado norteamericano. Pero en los 80 perdió su ventaja tecnológica y de estilo frente a su principal rival, Ford.
La corporación más grande del mundo estaba en problemas y si bien eso era conocido desde hace algún tiempo por los expertos, a mediados de la década del 80 lo era también para el común del público norteamericano. La GM necesitaba relanzar urgentemente su imagen y su línea de productos, y el Corvette serviría para ello.
Las metas de Chevrolet eran ambiciosas: el Corvette ZR-1 debía convertirse en el coche de serie con mejores prestaciones del mundo, ser tan manejable como el Corvette normal, y gastar poco combustible para evitar el “impuesto al uso de gasolina”.
El ingeniero jefe de Corvette, David R. McLellan, decía por entonces: “El ZR-1 es la afirmación de que hoy podemos hacer cosas que nadie ni siquiera soñó hace 10 o 20 años. Hemos logrado un espectacular nivel de rendimiento y aún somos capaces de cumplir e incluso superar todas las normas gubernamentales para economía de combustible, seguridad, ruido y emisiones de escape”.
Por fuera, el ZR-1 no se veía demasiado diferente a cualquier otro Corvette. Algunos pensaban que, con todos los recursos de Chevrolet, se podría haber construido un coche más exótico. Sin embargo, esos recursos estaban limitados por una cuestión de costos y porque quieran mantener la tradicional imagen del modelo.
En un principio, Chevrolet quería usar un motor V8 de block pequeño, con 2 o 4 válvulas por cilindros y dos árboles de levas a la cabeza. De esta manera, para poner el motor no sería necesario modificar el chasis ni la carrocería de los Corvettes ya existentes. Lotus, que había trabajado previamente con GM en otros proyectos, fue escogida (en abril del 85) para desarrollar el motor.
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Originally posted 2011-10-01 19:30:16.
