Cuando el Fiat 124 Spider llego al mercado en 1966, la época de los roadsters vigorosos de clase media y con un precio accesible iba a hacerse esperar aún tres décadas más.
Especialmente por esta razón el 124 Spider fue un verdadero éxito, ya que constituía, junto con el MG B, también perteneciente a la categoría, una clase aparte. Unas bellas líneas, una técnica moderna y un precio seductor eran sus bazas: el éxito estaba garantizado para el Fiat 124 Spider.
Los primeros prototipos del Fiat 124 Spider fueron probados en abril de 1966, mientras que el primer coche fue presentado en el Salón de Turín en noviembre de ese mismo año.
El Fiat 124 Spider, con un estilo muy parecido al del Ferrari 275 GTS, es un muy buen ejemplo de cómo un diseño acertado puede perdurar durante años. En efecto, en el momento de su presentación, este biplaza diseñado por Sergio Pininfarina, no era más que una innovación óptica pasajera, ya que resistía con creces la comparación con cualquiera de los roadsters de finales de los años 90. Esto confirma que no es necesario ceder a los criterios de una moda cambiante para conseguir el éxito, y que el verdadero buen gusto no tiene fecha de caducidad.
Cuando el spider llegó primero a Europa y poco después a Estados Unidos, en los años sesenta, parecía un coche demasiado reservado para su época y también para su género. En efecto, los sastres de Pininfarina dotaron a las aletas delanteras de los abombamientos típicos de la época, pero la parte trasera muestra los últimos muñones de lo que habían sido unos alerones.
Aparte de esto, este spider desprovisto de cromados y de vanos adornos tiene quizá una tendencia excesiva a asemejarse a un Fiat, lo que en realidad es.
Fue precisamente eso lo que le valió un importante éxito. Sólo un fabricante como Fiat podía ofrecer un verdadero coche deportivo, biplaza descapotable, a un precio realmente sensacional. Cuando salió al mercado, al mismo tiempo que el Fiat Dino Spider y el Alfa Romeo Duetto Spider, el 124 costaba exactamente lo mismo que una berlina de clase media. Y sólo una marca como Fiat podía sacar a la calle un coche de gran serie con verdaderas exquisiteces técnicas.
El 124 Spider estaba equipado con frenos de disco en la cuatro ruedas, su conductor podía disfrutar de una caja de cambios de cinco velocidades de serie, y sus cuatro cilindros de 1,4 litros desarrollaban una potencia de 90 caballos gracias a ciertos elementos seductores: una culata de aluminio, dos arboles de levas en cabeza accionados por correas dentadas y un cigüeñal con cinco palieres. Este motor, entregado por Osca de Bolonia, fue sustituido enseguida por un 1,6 litros, después por un 1,8 litros y finalmente por un 2 litros.
Entre 1975 y 1981 el Spider se comercializó sólo en Estados Unidos y después hizo su reaparición en Europa hasta el final de su producción en 1986. En total se fabricaron casi 200.000 unidades.
Mide 3,97 mm, de largo, 1,61 mm, de ancho, y 1,25 mm de alto. Pesa 960 kg. La velocidad máxima es de 170 km/h y va de 0 a 100 km/h en 12 segundos.
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Originally posted 2011-09-30 17:34:49.